Consigue que tus prendas nia te acompañen mucho tiempo con estos consejos de cuidado:
Lavado
Recomendamos lavar a baja temperatura (máximo 30 ºC) siempre que sea posible, para ahorrar energía y maximizar el cuidado de las prendas. Lavar a mayor temperatura puede hacer que encojan mínimamente (3-5%), pero esto no afectará al ajuste.
Lava con prendas de materiales y colores similares, evitando aquellas con cremalleras, botones y otros elementos que pueden causar abrasión en el tejido.
El centrifugado puede hacer que las fibras del algodón sufran y acaben perdiendo suavidad y propiedades, así que si puedes, evítalo. En todo caso, elige un centrifugado lento.
Minimiza la limpieza en seco, es un proceso químico agresivo. Mejor para el medio ambiente y tu bolsillo.
¿Cómo realizar un lavado más sostenible? Sustituye el detergente tradicional por nueces de lavado, actúa igual que un jabón convencional, es hipoalergénico y biodegradable.
Suavizante
Fabricamos con una materia prima de máxima calidad, por lo que no necesita un extra de suavidad. Si lo que buscas es un acabado más perfumado, puedes utilizar ácido cítrico como suavizante: no daña los tejidos y facilita el alisado de las arrugas.
Secado
Preferiblemente, tiende al aire evitando el sol directo. Estira bien las prendas y dales la vuelta antes de colgarlas.
En caso de usar la secadora, mejor hacerlo a baja potencia.
Planchado
En ocasiones, seleccionar el programa de vapor de la lavadora es suficiente para eliminar la mayoría de las arrugas en tu ropa de cama.
Siempre que puedas, evita la plancha.
No cargues mucho la lavadora. De esta forma favoreces un lavado más eficiente y con menos arrugas. Una vez acabado el programa de lavado, retira el contenido lo antes posible.
Y si quieres conseguir un acabado de hotel, elige un planchado a temperatura media.